Presentación de Izquierda Anticapitalista en Villalba II

El pasado día 13 de abril tuvo lugar en un céntrico establecimiento de collado Villalba el acto de presentación de Izquierda Anticapitalista en la Sierra. Nadie mejor para presentar nuestro partido como nuestr@s compañer@s Judith Carreras y Miguel Romero ante un grupo de personas procedentes de diversos pueblos de la comarca del Guadarrama.

La presentación corrió a cargo de Judith quien no pudo dejar de comentar el carácter mundial de la crisis actual que estamos sufriendo no sólo financiera, sino también alimentaria, energética y ecológica. Sobre el porque presentar una candidatura a unas elecciones europeas y con este nombre, esa era en definitiva la cuestión que los ponentes justificaron durante sus intervenciones. Ante todo, nos contaba nuestra compañera porque nos repugna, nos llenan de rabia las “soluciones” que están aportando los gestionadores de este sistema que es el origen de la crisis actual y no de unos cuantos capitalistas avariciosos. Consistente dicho plan de soluciones como pudimos comprobar tras la clausura de la Cumbre del G20 en destinar otro billón de dólares (en total suman 5) a rescatar a las grandes empresas para evitarles la quiebra, ni se contempla una medida similar a los millones de trabajadores en paro, las verdaderas víctimas de esta crisis.

Vemos con estas medidas a aplicar una incoherencia fruto de una ofensiva ideológica neoliberal a la que, según ellos, no hay alternativa. Esto es a un sistema que consume más recursos de los necesarios, que privatiza todos los Servicios públicos, hasta el agua, impidiéndonos con sus especulación inmobiliaria acceder a una vivienda convirtiendo tal derecho en un privilegio; un sistema que nos niega un entorno ecológico.

En el ámbito nacional, las soluciones a la crisis consisten en planes inversores para más infraestructuras en una especie de huida hacia delante, con una mayor flexibilidad en el trabajo, corrupción en la política, ilegalización de partidos, represión para las protestas estudiantiles, etc…

Ante este panorama, este desencanto político social, pensamos que no solo vale la pena resistir sino también levantar la cabeza sin pedir disculpas por ello pero ¿Quienes somos? ¿Que pretendemos? ¿Que hacemos? Se preguntaba nuestra compañera.

Izquierda Anticapitalista es una organización centrada en la participación de luchas de una forma honesta y combativa. Con su constitución en noviembre del año pasado tratamos a partir de Espacio Alternativo de crear un polo anticapitalista, una autoconstrucción propia pero con otras fuerzas. Buscamos la confluencia con otras fuerzas anticapitalistas pues somos conscientes de que no somos “La Izquierda Anticapitalista” sino parte de ella. Tampoco una sucursal del NPA francés, entendemos que esa organización al igual que su antecedente, la LCR ha ido creciendo desde las huelgas de funcionarios de 1995, el NO a la Constitución Europea, el NO al Contrato de Primer Empleo, a las medidas privatizadoras y criminalizadoras de Sarkozy, etc… El NPA es un partido que ha ido creciendo gracias a las luchas en las que ha estado, y es que sin éstas no sería posible crear un partido. En ese sentido nosotr@s coincidimos con el NPA al no entender un partido como una creación artificial, una sigla más sino como producto de unas luchas, como ha resultado en Francia la LCR y ahora el NPA.

¿Por qué presentarnos a las elecciones europeas? Ésta no fue una decisión inmediata ni mucho menos, fue producto de un año de discusiones y debates tras la constatación de que no había ninguna candidatura anticapitalista que criticase el sistema que nos ha llevado a la mayor crisis de la historia. Con tal pretensión pretendimos abrir el debate con la participación en los Movimientos Sociales, teniendo claro que no pretendemos gestionar el sistema capitalista y no aspiramos a ser políticos profesionales ya que no compartimos esa forma de hacer política.

Por esta razón nos lanzamos a la campaña de lograr las 15.000 firmas necesarias en lugar de ir directamente a obtener las de 50 cargos electos pues ésto no nos daría visibilidad ni nos distinguiría de otros partidos artificiales. Para ello lanzamos la idea de crear comités de apoyo a la candidatura, no solo con objeto de recoger firmas sino también de participar en la redacción del programa de una forma abierta y de momento hay 17 grupos creados en toda la geografía española, lo que consideramos una respuesta positiva habida cuenta de que en muchos lugares ha sido su generación espontánea, siendo el programa que queremos elaborar con la gente que se nos una en estos comités no de gobierno sino de lucha pues no pretendemos terminar este proceso el 7 de junio, día de las votaciones, sino que pretendemos acercarnos a los Movimientos Sociales en un proyecto a largo plazo que lógicamente va mas allá de las elecciones. Por ello el 10 de junio celebraremos una conferencia abierta para discutir los ejes programáticos de Izquierda Anticapitalista.

Miguel Romero comenzaba su intervención interrogándose sobre que es ser anticapitalista, y más para un partido, ello supone una tarea enorme, la organización del partido que queremos crear nosotros que somos parte de la gente indignada con la situación actual esa lluvia de millones para empresas las consultas del presidente del gobierno al primer banquero de la nación para ver que hacer ante la crisis, la salvación de una entidad bancaria como CCM y no a quienes les ahoga la hipoteca.
Así pues nos situamos entre toda esa gente a la que nos afecta la crisis y no nos gustan las soluciones ofrecidas pero no entramos en ese segmento de personas que se resigna ante la situación. Así pues entre los descontentos que no se resignan estamos nosotros que pretendemos humanizar el discurso anticapitalista criticando lo que hay, si bien son mayoría quienes dicen que el sistema es el que hay y no puede haber otro y no se puede cambiar, estamos quienes pensamos que hay que terminar con el capitalismo, y nos organizamos socialmente, ya sea en movimientos barriales, vecinales, sindicales, etc…. Es dentro de esas personas cansadas de este sistema y que no se resignan a tragar porque es lo que hay y no se puede hacer nada, entre quienes nos situamos nosotros.

Nuestro compañero nos hacía un llamado a recuperar la Política, en manos de profesionales a quienes hemos de arrebatársela y reapropiarnosla, habida cuenta de que las mayores iniciativas políticas no vienen de los políticos, así por ejemplo del movimiento ecologista han tomado los políticos profesionales la lucha contra el cambio climático y del movimiento feminista las política de igualdad y de género, si bien adaptándolas al sistema y no como venían planteadas por esos movimientos.
Ante quienes defendemos esa forma de hacer política, de base, de movimientos sociales, nos llaman antisistema, como refleja la prensa burguesa de forma muy negativa sacando imágenes de rotura de lunas de entidades bancarias y de mobiliario urbano para presentarnos como vándalos, si bien apuntaba Miguel que peor que hacer eso es ser banquero.
Continuaba su ponencia indicando que en IA tenemos como meta subvertir un sistema en el que no creemos, activar la indignación de la gente que tampoco cree y sobre todo aparcar la pasividad de esas masas descontentas con el sistema actual. Esa será nuestra principal tarea, y por ello nos rebelamos contra esa noción de que la política se circunscribe a presentarse a las elecciones simplemente.

Ante esta exposición alguno se nos preguntará como es que nos presentamos a unas elecciones y más europeas, tan alejadas del ciudadano. Consideramos el hecho de concurrir electoralmente una tarea secundaria, pues la principal es hacer política con los movimientos sociales, despertar a la gente de esos movimientos a la política, eliminar la connotación negativa que tiene la política por culpa de los políticos profesionales. El de elegir unas elecciones europeas y no unas municipales o nacionales es un ejemplo práctico de internacionalismo, pues pretendemos juntarnos en nuestra campaña con nuestros camaradas griegos, franceses, italianos, etc… para que compartan con nosotros sus experiencias de lucha en sus países.

En el caso de lograr un diputado de que serviría se preguntaba Miguel, Obviamente no nos planteamos sacar ninguno ante la modestia de nuestras fuerzas y no ser la electoral la prioridad fundamental además que el Parlamento Europeo es la institución europea que menos utilidad tiene para los ciudadanos. Sin embargo nos ponía el ponente de lo que supondría tener a un diputado sin lealtad institucional al PE pero que tuviera toda la lealtad a los movimientos sociales ante quienes habría de responder, de esta forma podríamos enterarnos con antelación suficiente para preparar la resistencia a Directivas como la de la vergüenza o la de las 65 horas y poder abortarlas con la presión de esos movimientos como ha sucedido con ésta última. Además sabríamos en que se derrocha el dinero público.

Sobre si es unitario el decidir ir en solitario a unas elecciones europeas, hay que desmitificar el término de unidad, con quien? Para hacer qué? No queremos entrar en un mercadeo de listas electorales no compartimos el marketing electoral de otras fuerzas, no es una cuestión de imagen publicitaria, eso se lo dejamos a las partidos electoralistas.

Acudimos a este proceso sin la pretensión de saberlo todo y estar por encima de todo, eso lo tenemos en cuenta al hacer el programa pues las reivindicaciones no las inventamos nosotros sino la gente que se moviliza, no inventamos objetivos ajenos a las personas ni pretendemos convertirnos en el gurú de la izquierda sino en una fuerza de activistas. De ahí que no nos llamemos La Izquierda Anticapitalista, sino IA siendo conscientes de que no somos los únicos de izquierdas y anticapitalistas.

Sobre Izquierda Unida, indicaba que La ley electoral actual le perjudica, no lo negamos y lo consideramos una discriminación, pero que haría IU con 14 o 15 diputados sino pretender un ministerio y apoyar al gobierno abandonando su discurso anticapitalista para gestionar el sistema. Al fin y al cabo es lo que hacen con su millón de votos y los concejales, diputados autonómicos, “concellers” resultantes. En que se ha quedado esa fuerza, como la ha canalizado sino para ocupar algunos puestos en las instituciones y nada más se preguntaba Romero.

En España no hay nadie en la actualidad que desestabilice el panorama político bipartidista desde fuera y tenemos claro que cualquier fuerza anticapitalista sería débil en el Parlamento pero no fuera de las instituciones, en la calle sí tendría fuerza. Con esto esta claro que somos pocos y somos conscientes de ello, pero no significa que tengamos vocación de minoría, pues queremos construir una fuerza anticapitalista, aspiramos a cambiar la vida política del país nada menos, de ahí la decisión de concurrir a unas Europeas y nuestro convencimiento de que es una tarea a largo plazo.

Sobre nuestro nombre, por qué llamarnos “Anti” Capitalistas? Obviamente a mucha gente no le gusta nuestro nombre y nos dirá que hemos de pensar en positivo, que asusta nuestra denominación. Sin embargo consideramos importante saber a qué nos oponemos pues si se rechaza algo de verdad, con fuerza, ésta se retroalimenta, por ello hemos de valorar positivamente el “Anti” sobre todo si se refiere al Capitalismo.

Sobre nuestro cuestionamiento al Capitalismo se nos dice que no somos realistas, pero es realista que una empresa con beneficios despida a trabajadores y el gobierno lo autorice en un ERE?, desde el punto de vista de quien es eso realista?

Para ilustrar esto Miguel citó una frase del empresario norteamericano Warren Buffet que apareció en New York Times en noviembre de 2006 quien decía “ hay una guerra de clases, es un hecho, pero es mi clase la que conduce esa guerra y estamos a punto de ganarla”. Con esta cita vemos que los poderosos lo tienen bien claro es a ellos a quienes queremos responder desde IA, ir a esa batalla y queremos ganarla. Aunque para lograrlo no nos presentaremos solos.

Que haremos para no estar solos, como crecer? En las luchas es la respuesta; es decir en organizar la resistencia a las agresiones de un sistema que genera contradicciones y conflictos. Se trataría pues poder organizar una fuerza que pase a la ofensiva, no sólo con grandes manifestaciones ni actividades efectistas sino desde lo cotidiano. Y es que el capitalismo genera contradicciones y conflictos que debemos aprovechar desde los movimientos sociales porque hace falta una organización que canalice las fuerzas de los movimientos sociales y evite el error de IU de plegarse al PSOE después de hacerlo al institucionalismo.