La LOMCE ataca los derechos de las de abajo lanzando medidas como:
a) Segregar al alumnado desde edades tempranas, estableciendo rutas diferenciadas que determinan su futuro académico. El objetivo principal del ministro Wert es hacer que el sistema educativo sea esclavo de las necesidades del mercado, ávido de trabajadores de baja cualificación. Lo que conlleva como consecuencia devaluar los contenidos académicos.
b) Dar un poder muy alto a la Iglesia Católica haciendo que la asignatura de religión sea evaluable en secundaria y cuente para la nota media de bachillerato. También facilitando la desviación de fondos públicos a escuelas concertadas.
c) Se llega a hablar de acabar con nuestro derecho a huelga determinado en el decreto 327/2010 y en el artículo 8 de la ley orgánica de 1985.
d) Se ataca a los derechos del profesorado, perdiendo competencias junto con el Consejo y escolar y precarizándose sus condiciones de trabajo, pudiendo impartir materias distintas o ser trasladado según las necesidades a otros institutos, con el desarraigo que eso supone.
e) Atentar contra los derechos de los pueblos a elegir sobre educación y cultura, cuestionándose la enseñanza en otras lenguas y reforzándose el nacionalismo español como eje para llevar a cabo reformas lesivas contra los intereses de lxs de abajo.
f) Devaluar los contenidos de la educación que reciben el alumnado, poniéndose énfasis en una enseñanza tecnificada en la que solamente se piensa en el estudiantado como un futuro trabajador que tiene que adaptarse a un mercado laboral «flexible» y precario. Así, materias como Filosofía o Historia son minimizadas en favor de otras de carácter instrumental.
Desde Izquierda Anticapitalista apoyamos la convocatoria de huelga de 72 horas y trabajaremos para que ésta sea un éxito movilizando los centros de estudios y solidarizándonos desde los diferentes sectores en los que participamos. Solo una movilización de conjunto puede permitir echar atrás este proyecto de ley infame. La huelga de los próximos días 5, 6 y 7 de febrero debe ser el primer paso de una primavera caliente en el que todas las luchas vayan convergiendo. En educación los estudiantes debemos converger con los profesores y con toda la comunidad educativa pero a su vez ésta debe converger con la lucha por una sanidad pública de calidad así como con empresas en lucha por la defensa de los puestos de trabajo como por ejemplo las movilizaciones de los trabajadores de Telemadrid o de los transportes. En ese sentido hay que seguir defendiendo la perspectiva de huelgas sectoriales, regionales para ir hacia una huelga general aún más contundente. Esta sigue siendo la mejor herramienta para permitir que confluyamos todas y todos contra estas políticas de recortes, ya las apliquen los gobiernos de derechas o los supuestos gobiernos de “izquierdas” del PSOE-IU.
La Huelga de los días 5, 6 y 7 de febrero tiene que ser un paso más en la construcción de un movimiento estudiantil a nivel estatal, coordinado y construido desde abajo, que tumbe las medidas antisociales y los recortes, vengan de donde vengan.
Comunicado de Izquierda Anticapitalista
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