Ante las última cifras del paro, ya nadie puede discutir la extrema gravedad de la situación. Es la crisis de un sistema que hunde naciones enteras en la miseria, que urde guerras como en Irak o Afganistán, niega la libertad de Palestina y lleva el planeta a la catástrofe. Es la crisis del capitalismo.Aquí, además, es el colapso de un modelo económico basado en el tocho y la especulación, la precariedad y los bajos costos sociales. Pero, ¡qué lejos está aún el movimiento obrero de reaccionar ante todo ello!
El gobierno de Zapatero navega sin brújula: inyecta dinero público a bancos y multinacionales, reduce impuestos a los más ricos, ... Es decir, pretende atenuar la crisis ayudando a sus causantes y persistiendo en las políticas neoliberales que la han amplificado. No es de extrañar que la gran patronal exija despidos más baratos, menos derechos, salarios congelados y más privatizaciones. Ni sorprende tampoco que la derecha, a pesar de los escándalos de corrupción que salpican al PP, se envalentone y suba en las encuestas.
La crisis la está pagando la población trabajadora, la gente más humilde. ¿Qué más hace falta para que los principales sindicatos llamen a la lucha? ¿Acaso no hay motivos para una Huelga General, como se oye en boca de los líderes de CCOO y UGT? ¡Tenemos más de cuatro millones de razones! Y, sobre todo, necesitamos una potente movilización para imponer soluciones que estén realmente a la altura de las circunstancias: la NACIONALIZACIÓN BAJO CONTROL SOCIAL DE LA BANCA Y DE LOS SECTORES ESTRATÉGICOS, EMPEZANDO POR LA ENERGIA; la DEFENSA DE LOS SERVICIOS PÚBLICOS; la PROHIBICIÓN DE LOS DESPIDOS y la INTERVENCÍÓN DE LAS EMPRESAS QUE PRETENDAN DESLOCALIZAR; el reparto del trabajo mediante la REDUCCIÓN DE LA SEMANA LABORAL A 35 HORAS; la PROLONGACIÓN INDEFINIDA DEL SUBSIDIO DE DESEMPLEO; el SALARIO MÍNIMO A 1.200 euros...
Para eso hace falta unificar las luchas, coordinar resistencias, aprovechar cada ocasión para agrupar fuerzas... El 14 de Mayo, CCOO y UGT convocan una jornada de manifestaciones. De sus cuadros y afiliados depende en gran medida que esa convocatoria se convierta en un clamor a favor de una movilización general y tenga continuidad. El día 21, los sindicatos vascos convocan en Euskadi una jornada de huelga general. ¡Ojalá sea un éxito! De los activistas más conscientes de las distintas corrientes sindicales depende que se superen los obstáculos a la indispensable unidad de acción. Sólo así, paso a paso, construiremos el movimiento hacia la HUELGA GENERAL.
Con tal perspectiva sale Izquierda Anticapitalista a la calle este 1º de Mayo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario