La reciente sentencia del Tribunal Supremo por la que, en respuesta a las impugnaciones presentadas por la Fiscalía y la Abogacía del Estado, ilegaliza y disuelve ANV, supone una nueva vulneración flagrante del llamado estado de "derecho". Los derechos políticos de los ciudadanos (como son los de participación, asociación y representación política) recogidos en la Constitución de 1978, han sido de nuevo conculcados a instancias del poder Ejecutivo.
Con esta sentencia, amparada en una Ley de Partidos contraria a principios básicos de su propio Estado de derecho, no sólo se está interponiendo un nuevo obstáculo a la reanudación del proceso de paz y de resolución política y democrática del conflicto vasco, sino que se da también otro paso adelante en la consolidación de un doble rasero jurídico mediante la aplicación del "derecho penal del enemigo" a un amplio sector de la población vasca. Se tiende así a extender cada vez más la categoría de "terroristas" a un número creciente de ciudadanos y ciudadanas por el mero hecho de compartir los objetivos defendidos por aquellas organizaciones armadas que son calificadas como tales.
Esta situación, por desgracia, no es nueva, sino que en los últimos años estamos teniendo que asistir a una constante criminalización del movimiento abertzale, con la ilegalización de organizaciones juveniles y sociales, medios de comunicación, etc. De esta forma, se ha dado un salto cualitativo en la escalada represiva del Gobierno español y el Poder Judicial contra la libertad de expresión, el derecho a la reunión y asociación, así como la libertad ideológica. Pero el caso de ANV es todavía más escandaloso por tratarse precisamente de una formación política de larga historia, cuya existencia legal data de 1930, que repudia explícitamente en sus estatutos la violencia.
Es necesario que la izquierda de todo el Estado denuncie esta situación y manifieste su solidaridad, trabajando por construir un clima social que favorezca el retorno hacia el camino del dialogo y la negociación. Desde Espacio Alternativo rechazamos enérgicamente la ilegalización de ANV y el proceso similar abierto contra el PCTV, que suponen una nueva vulneración de derechos de la ciudadanía vasca. A la vez que exigimos el reconocimiento sin condiciones del derecho de la izquierda abertzale a participar y estar representada, así como la paralización inmediata de la escalada represiva y judicial contra ella, una situación que pasa por la derogación inmediata de la Ley de Partidos. Además, es fundamental asegurar el reconocimiento de los derechos sociales y políticos de la ciudadanía vasca, entre los que ineludiblemente se debe de encontrar el respeto a la libre decisión de su futuro, recogido en el derecho efectivo a la autodeterminación. De esta forma, desde las organizaciones políticas y sociales, tenemos que seguir trabajando por conseguir un escenario político de ausencia de violencia (represiva, judicial y armada) que posibilite el retorno al dialogo como instrumento imprescindible para abordar la resolución del conflicto político vasco.
Comunicado de Espacio Alternativo
Citación de circonstancia:
"Cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas, guardé silencio, porque yo no era comunista,
Cuando encarcelaron a los socialdemócratas, guardé silencio, porque yo no era socialdemócrata,
Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas, no protesté, porque yo no era sindicalista,
Cuando vinieron a llevarse a los judíos, no protesté, porque yo no era judío,
Cuando vinieron a buscarme, no había nadie más que pudiera protestar."
Martin Niemöller, 1939.
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