20:00 horas sede PP en Madrid: Calle Génova, nº 13.
21:00 horas sede PSOE en Madrid: Calle Ferraz, nº 70.
22:00 horas Puerta del Sol.
23:00 horas Congreso de los Diputados: Carrera de San Jerónimo, nº 36.
¡Toma la calle, no a los recortes, no a la precarización de la vida!
Miles de personas se han echado a las calles de Madrid en la noche de hoy. A partir de una convocatoria en las redes sociales seguid a las movilizaciones de los funcionarios de este viernes, a las 20 horas la calle Génova, sede del PP madrileño, hizo de punto de comienzo para un largo recorrido que acabaría cuatro horas, siete detenidos y varios heridos después en la Puerta del Sol.
Activistas del 15M y ciudadanos que han querido manifestar su malestar por las medidas anunciadas hoy por el Gobierno de Rajoy, último hachazo de austeridad en nombre del ajuste del déficit. Ciudadanos como Miguel, a menos de una hora del comienzo de la marcha se encontrará a pocos metro de la calle Ferraz preguntándose "por qué", con sus 57 años, un antidisturbio le hubiese tenido que romper la nariz. "Si somos padres de familias, nos manifestamos por los derechos nuestros y de nuestros hijos", lamentaba Carmen, quien le acompañaba.
La marcha, sin embargo, empezaba en un clima rivendicativo ante la sede de los populares, aunque en esa ocasión se provocaba la primera detención. Pero la policía nada pudo hacer cuando los manifestantes se dieron la vuelta para inundar la calle Sagasta, cruzar las glorietas de Bilbao y San Bernardo y dirigirse hasta la sede de los socialistas en Madrid. "PSOE, PP, la misma mierda es" y "vuestra deuda no la pagamos" era cánticos casi obligados, además de varias referencias a Andra Fabra y su "que se jodan" gritado en el Congreso de los Diputados.
Lo que encontró la marcha al acercarse a la calle Ferraz fue un fuerte despliegue policial. A pesar de los coros de "tu paga extra, dónde está", el clima llegó a tensarse hasta que los agentes de la Unidad de Intervención Polcial decidieron dispersar los concentrados con una carga. Allí fue donde al menos otras dos personas fueron detenidas y Miguel recibía el porrazo que le dejaría, incrédulo, a la espera de la llegada del Samur. Fue uno de los muchos que sufrieron una directa agresión policial.
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