Crónica de una Huelga exitosa: 14M Huelga universitaria

La jornada de Huelga convocada por la red de asambleas universitarias madrileñas “Toma la facultad” ha demostrado la capacidad del estudiantado universitario para paralizar la vida en los campus y facultades. La huelga, enmarcada en una jornada de lucha estatal en defensa de la educación pública bajo el lema “Nuestra educación no pagará vuestra deuda”, ha sido capaz de romper la normalidad universitaria y metropolitana, demostrando la fuerza de un movimiento estudiantil que parecía apagado y dando un golpe sobre la mesa en forma de aviso al Ministerio de Educación y José Ignacio Wert: el estudiantado y la comunidad universitaria no van a permitir los recortes y las reformas mercantilizadoras que se vienen aplicando desde hace unos años y que el gobierno pretende seguir implantando.

La Huelga comenzaba el día 13 por la noche, con más de cuatrocientos estudiantes encerrados en diferentes facultades para preparar la jornada de lucha del día siguiente. Los encierros de Somosaguas en la UCM y el encierro centralizado de la Universidad Autónoma fueron los más destacados, y a éstos hay que sumar otros tres en Ciudad Universitaria. La mañana del 14 el campus de Somosaguas amanecía cerrado por barricadas, en Cantoblanco estudiantes de la UAM cortaban las vías de tren, y en Ciudad Universitaria las estudiantes de Geografía e Historia levantaban barricadas que impediría el tráfico de autobuses durante hora y media, hasta la llegada de numerosos efectivos de antidisturbios a la facultad. Las facultades de Filosofía y Filología, Historia y Educación de la UCM se mantuvieron vacías durante toda la mañana, con piquetes en sus puertas. El número de estudiantes que acudió a clase fue especialmente reducido, pudiendo hablar de un 90% de seguimiento en estas facultades. Destacamos también el seguimiento notable en Ciencias de la Información y en Bellas Artes.


En la Universidad Autónoma, las facultades de Filosofía y Letras y Biología se encontraban inactivas con un seguimiento total de la Huelga, y en la Universidad Politécnica, escuelas como INEF o Arquitectura amanecían cerradas (100% de seguimiento) mientras que el resto registraban una asistencia también baja a las clases, como resultado de dos semanas previas de movilizaciones en contra del despido de 301 trabajadores de la UPM y del recorte de sueldos de un 10%.


En este sentido, la huelga ha sido especialmente potente en los tres grandes campus de las universidades públicas, donde las barricadas, los cortes de vía y el alto seguimiento de las protestas han sido la tónica general: Somosaguas, Ciudad Universitaria y Cantoblanco. Además, en la Universidad Carlos III y en la Rey Juan Carlos, pasaclases de más de doscientos estudiantes han impedido el desarrollo normal de las clases. En medio de este clima de agitación permanente, hay que denunciar la alta presencia policial dentro de los campus, especialmente en Ciudad Universitaria, donde unas veinte unidades de la UIP han rodeado la Facultad de Historia para posteriormente escoltar de forma agresiva e intimidatoria a las trescientas estudiantes que participaban en un “pasacampus”.


Por la tarde, a partir de las 16h, las marchas desde las universidades hasta el comienzo de la manifestación convocada en Nuevos Ministerios han aglutinado al activismo estudiantil haciendo realidad la consigna “Si nos roban el futuro, bloqueamos la ciudad”. Decenas de miles de estudiantes universitarias y de instituto, docentes, trabajadoras de Universidad, organizaciones de defensa de la Educación y los servicios públicos, colectivos como Juventud Sin Futuro o la Marea Verde, y diversas secciones sindicales, se han dado cita en una manifestación multitudinaria y combativa, que se desarrolló sin más problemas que la aparición de pequeños grupos fascistas que fueron de inmediato expulsados. Durante la manifestación, donde más de 15.000 personas recorrieron la Castellana hasta el Ministerio de Educación, se llevaron a cabo diversas acciones, descuelgue de pancartas y mucha animación. A la llegada al ministerio de Educación, en la calle Alcalá, se procedió a la lectura del comunicado por parte de un trabajador despedido de la Universidad Politécnica. Con ello y el humo de las bengalas finalizaba la jornada de Huelga del 14 de Marzo. La lucha continúa el 15 por parte de un movimiento estudiantil que ni está muerto ni podrá estarlo nunca. Contra los recortes, la privatización del conocimiento y la universidad-empresa, no nos resignamos: la lucha es el único camino.

Víctor Valdés y Julia Cámara, activistas estudiantiles y militantes de Izquierda Anticapitalista

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