La empresa ESABE Limpieza, es una empresa ya muy conocida en todo el Estado perteneciente al Grupo ESABE que vive como un parásito de los concursos públicos y explota de la manera más vil sus asalariados. Entidad totalmente corrupta e insolvente siguen obteniendo concesiones en particular de la comunidad de Madrid quizás porque cuenta entre sus directivos, familiares directos de nuestra presidenta Esperanza Aguirre.
Estos últimos años se han multiplicados en los juzgados irónicamente, las denuncias por incumplimientos repetidos en materia laboral: abono parcial y con retraso de varios meses de las remuneraciones de los empleados, omisión de alta de trabajadores a la seguridad social, incumplimiento de los pliegos de requisitos de las licitaciones, faltas a las condiciones de los convenios, fraude en las horas extras...
Varias cuentas de ESABE fueron embargadas como las de BANKIA en Enero del presente año donde los contratistas llegaron a depositar los fondos correspondientes pero que nunca fueron dirigidos para pagar las nóminas de las empleadas.
En efecto, recordemos que más del 80% de estos asalariados son mujeres y cobran apenas 800 euros al mes. Los casi 300 trabajadores de la limpieza de los Juzgados subrogados a ESABE desde junio 2011 decidieron convocar una Huelga Indefinida a partir del 7 de Mayo para cobrar el trabajo realizado. La última paga recibida por el personal es de Febrero, y que dice la Administración: "si quieren cobrar tendrían que denunciar a la empresa que tiene la concesión".
Cuando las entidades dependientes de ESABE son definitivamente incapaces de asumir sus compromisos los gestores abandonan la nave para abrir una nueva compañía dispuesta a asumir el relevo sin tener que asumir los compromisos fallidos de la empresa a la deriva. De esta forma ESABE cuenta con varias decenas de entidades con oscuras relaciones patrimoniales.
Una hipocresía absoluta puesto que las comunidades sabían y saben perfectamente de todas las denuncias, embargos y prohibiciones que pesan sobre ESABE (alias BUBOS - ESAVE...) y les concede los contratos sin escrúpulos, incluso cuando las pujas corresponden a importes que manifiestamente son insuficientes para cubrir los gastos ocasionados por la explotación.
Cuando las entidades dependientes de ESABE son definitivamente incapaces de asumir sus compromisos los gestores abandonan la nave para abrir una nueva compañía dispuesta a asumir el relevo sin tener que asumir los compromisos fallidos de la empresa a la deriva. De esta forma ESABE cuenta con varias decenas de entidades con oscuras relaciones patrimoniales.
No podemos sorprendernos considerando este largo recorrido de practicas deslenables que la comunidad de Madrid y ESABA estén negociando y a punto de firmar juntos la concesión del servicio de vigilancia de las sedes judiciales de la Comunidad.
Las trabajadoras de esta empresa se están convirtiendo a su pesar en entidades de financiación a 60 o 90 días de las actividades empresariales de la compañía privada, cuando tienen que pagar necesidades básicas de sus familias, situación intolerable llevado a cabo con la complicidad de la administración autonómica y pagado con fondos públicos.
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