Las dos acciones que el Sindicato Andaluz de Trabajadores ( SAT) realizó el pasado miércoles 8 de agosto en dos supermercados de las marcas Mercadona y Carrefour en Écija y Arcos de la Frontera, respectivamente, han provocado exactamente lo que pretendían: abrir un debate público en todos los medios y redes sociales del país sobre el cada vez mayor número de personas que pasa hambre en este país y sobre los límites de la propiedad privada cuando se trata de combatir esta lacra. Los objetivos de la acción han sido totalmente oportunos, necesarios y deben ser apoyados por cualquier organización de izquierdas, social o política.
Los medios de comunicación de todo signo están criminalizando de forma salvaje al SAT y especialmente, a Juan Manuel Sánchez Gordillo, Alcalde de Marinaleda y parlamentario de IU-Andalucía, que participó en la acción de Mercadona. El Gobierno del PP, temeroso del efecto contagio que esta iniciativa pueda provocar por el desafío a la propiedad privada que supone, ha desplegado toda su batería represiva, deteniendo ya a 5 de los miembros del SAT que participaron en la acción y anunciando futuros arrestos y multas contra el SAT, y reprobaciones parlamentarias y medidas penales contra Sánchez Gordillo.
Para volver a refrendar su papel de “partido de orden” el PSOE ha calificado de “barbaridad” a la acción del SAT y reclama también acciones judiciales contra ellos. Cada día que pasa está más claro que el PSOE seguirá el mismo camino que el PASOK griego. En el caso de IU, no ha emitido aún un comunicado oficial de apoyo al SAT y sus portavoces se han movido entre la crítica a la acción del Eurodiputado y hombre fuerte de IU-Andalucía, Willy Meyer, que declaró que “acciones vanguardistas como esta, no sólo no sirven, sino que pueden convertirse en obstáculo" a la crítica a las “formas” del Coordinador de IU-Andalucía y Vicepresidente andaluz Diego Valderas, al apoyo matizado de Llamazares. Siempre políticamente correctos.
Llama poderosamente la atención el silencio de Cayo Lara durante todos estos días. Sin duda, la presencia de IU en el Gobierno andaluz junto con el PSOE tiene que ver con esta tibieza. IU se encuentra sometido a una gran contradicción con su presencia en este Gobierno, ya que se ve obligada a aplicar recortes, aunque sea “por imperativo legal”, y a situarse de esta forma enfrente de los y las trabajadores/as y no a su lado. Contrastan estas dudas con el enorme apoyo que está recibiendo el SAT de movimientos sociales y gentes de izquierda que por fin se ven reflejados en sindicalistas y políticos que hacen lo que dicen, incluyendo a Amauir, que ha declarado su apoyo, sin reservas, a la iniciativa del SAT. Mención aparte merecen las declaraciones de las direcciones sindicales de CCOO y UGT, quienes critican las formas del SAT y se olvidan de la violencia, amparada por la ley, que suponen el desempleo y los recortes sobre millones de personas.
Izquierda Anticapitalista (IA) quiere manifestar su total apoyo y solidaridad con el SAT. Compartimos tanto los objetivos de las acciones en Mercadona y Carrefour como la forma de llevarlas a cabo. IA también rechaza la brutal campaña de los medios de comunicación contra Sánchez Gordillo y el SAT. IA reclama que cese la represión contra la gente que realizó una acción completamente pacífica y cuyo objetivo era demostrar que en el Estado español el hambre empieza a ser una lacra social muy extendida gracias a la crisis capitalista. Por encima de la propiedad privada, siempre están los derechos fundamentales a la alimentación, alojamiento y a tener una vida digna, los cuales, cada día más, son incompatibles con el capitalismo.
Comunicado de Izquierda Anticapitalista
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