Nos encontramos a 9 de Julio de 2009 y los grandes acontecimientos que acabamos de vivir, son la muerte “espectáculo” de Michael Jackson y la compra de Christiano Ronaldo por el Real Madrid. Siento decir que estos acontecimientos capitalistas no son lo más importante que estamos viviendo.
La noche del 24 de Junio del 2009, comenzaba el golpe de Estado de Honduras. El ejército y los EE.UU. volvían otra vez a asumir ese olvidado papel de golpistas facciosos que han tenido a lo largo de todo el siglo XX. El primer Ministro de Honduras, Manuel Zelaya Rosales esa noche era expulsado violentamente del país, por inconstitucionalidad por, querer perpetuarse en el poder, "por crear una dictadura" o simplemente por ser un "populista". Esta es la excusa de los golpistas y a la vez la falacia de los principales medios de comunicación, como El País o Le Monde (por no hablar del resto de periódicos filofascistas españoles) que lo presentan como noticia. La mayor parte de los medios de comunicación han embellecido la dictadura militar hablando de “conflicto entre poderes” un contraste flagrante entre la demonización de Irán y la discreción sobre el golpe de estado hondureño.
Pero no se habla nada de la situación de Honduras y su pueblo, de su política, ni de lo que ha hecho el presidente Zelaya. Lo que leemos en los diarios, es como Zelaya se nos representa como un cabrón, un demonio, pero todo esto sin siquiera mencionar lo que ha hecho a excepción de la excusa de los golpistas.
Honduras es el ejemplo perfecto de “República Bananera” en manos de los EEUU. Dependencia y pillaje colonial han provocado una enorme brecha entre ricos y pobres. Según la ONU el 77% de la población vive en la pobreza. El ejército hondureño ha sido formado y entrenado directamente por el Pentágono.
Los proyectos sociales de Zelaya, que NUNCA se han mencionado en los medios, “grosso modo” son:
- Subida del salario mínimo.
- Lucha contra la hiperexplotación en las plantas exportadoras de las firmas estadounidenses.
- Disminución del precio de los medicamentos, ayuda a los campesinos oprimidos.
Vemos igualmente como se silencian los momentos mas graves del golpe militar, en donde se ataca indiscriminadamente a la población.
EE.UU. llevaba menos de una década (lo cual ya es mucho), sin intervenir directamente en America Latina, estaba mas ocupado en dar por culo a Oriente Próximo. Ahora ha vuelto a America Latina, utilizando sus formas más toscas y menos diplomáticas, las propias de los años 70 y 80 del pasado siglo XX.
El presidente Obama, se ha presentado a Europa como una persona inteligente, intelectual, diplomático y anecdóticamente pseudo-pacifista, comparándose con Martín Luther King. Hasta hace menos de un mes, Obama no paraba de aparecer en los medios, hoy no sabemos donde esta, sobre Honduras no dice nada y cuando Zelaya le ha pedido ayuda y cooperación, Obama “líder de la libertad yankee,” se la niega. Hace solo dos días Obama condenó el golpe, pero solo de cara a la galería. Ya que si la primera potencia del mundo condena un golpe de estado y los golpistas se muestran indiferentes, solo cabe entender una de dos posibilidades,
a) Estados Unidos ya no es una potencia
b) Estados Unidos no tiene ningún interés en parar un golpe financiado y preparado por ellos mismos.
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